Aplicar hielo en el rostro es uno de los secretos de belleza que ha pasado de generación en generación ya que ayuda a rejuvenecer, deshinchar y tonificar la piel y esto se debe principalmente porque cierra los poros dilatados y tersa la piel al encogerse por el frío, además genera la contracción de los vasos sanguíneos por lo que disminuye el flujo sanguíneo controlando así la inflamación.
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Utilizar el hielo en el rostro es una tradición de las mujeres asiáticas que lo ocupan todas las mañanas para lucir una piel de "porcelana", eso es posible porque el efecto que causa ayuda a que nuestra piel luzca radiante, ya que impulsa la eliminación de impurezas e incluso arrugas ya que ayuda a tratar distintos problemas musculares y a desinflamar y curar los tejidos de la piel.
El hielo en el rostro es conocido como un potente antiarrugas casero, ya que incluso se ocupa para mejorar enfermedades como el acné o las espinillas, para los puntos negros y también para mejorar la circulación. Sin embargo, para que tengas los beneficios que hemos enumerado, te decimos cuál es la forma correcta para aplicarlo:
1- Aplicar el hielo directo al rostro
Sigue este ritual todas las mañanas. Antes de aplicar el hielo, tu rostro debe de estar completamente limpio. Una vez que tengas el hielo da un masaje sobre el cutis, con movimientos circulares en la mandíbula, mejillas, frente, nariz y barbilla, párpados y debajo de los ojos. Recuerda siempre hacerlo en el sentido de los músculos para que penetre mejor.
2- Aplicar el hielo con una toalla de papel
Sigue este ritual todas las mañanas. Antes de aplicar el hielo, tu rostro debe de estar completamente limpio. Envuelve el hielo en un pañuelo o tela delgada para evitar irritación, de igual forma aplica mandíbula, mejillas, frente, nariz y barbilla, párpados y debajo de los ojos, esto te ayuda a que tu piel luzca hermosa de manera natural y a estimular la circulación de la sangre.
Te recomendamos que complementes su uso tomando mucha agua, durmiendo bien y utilizar bloqueador cada 4 horas, como mínimo. Además recuerda que una buena alimentación es base fundamental para conservarla saludable, por lo que trata de consumir antioxidantes.