El café es un grano que ha sido consumido por muchos años con una bebida calienta y con el tiempo surgieron diferentes técnicas para prepararlo. Gracias al consumo de esta bebida muchos estudios buscan revelar qué tan bueno es para la salud y varios sitios recomiendan que se puede usar para el cuidado de la piel y hoy te enseñaremos cómo hacer una mascarilla de café.
Pero, ¿qué es el café? El sitio Café Barsel dice que proviene del arbusto Cafeto y en estado silvestre puede alcanzar los 12 metros de alto y no es un arbusto delgado, sino frondoso. Y produce como fruto la cereza del café, sí, el café es una fruta y es pequeño, redondo y de color rojo y en su interior se encuentran los famoso granos del café.
Estos granos del café dentro del fruto son las semillas de la planta y esta es la que se somete al proceso de molienda, extracción y el secado. Este grano ya molido y consumido ofrece diferentes beneficios, como lo explica el sitio Mayo Clinic porque puede ofrecer alguna protección contra diferente tipo de enfermedades como la Diabetes tipo 2, pero ¿qué tan bueno es para el cuidado de la piel?
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¿Qué hace la mascarilla de café en la cara?
El sitio Derma Medic dice que existen cinco beneficios de hacer una mascarilla de café para el rostro si se usa correctamente como un exfoliante. Protegerá la piel frente a la radiación ultravioleta del sol y del envejecimiento, se tiene menor riesgo de padecer cáncer de piel, disminuye la resequedad en la piel al regular el pH y tiene un efecto antinflamatorio. Para que funcione, lo más correcto es acudir con un dermatólogo para que analice primero el estado de salud de la piel.
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Mascarilla de café para la cara
Es muy fácil hacer una mascarilla de café en casa, pero hay que tener el espacio correcto para su elaboración:
- Una cucharadita de café molido
- Una cucharadita de miel
- Una cucharadita de bicarbonato de sodio
- Una cucharadita de azúcar granulada
Una vez reunidos todos los ingredientes, lo que se tiene que hacer es licuar todos los ingredientes juntos, vaciar la mezcla en un recipiente y untar poco a poco en la piel. El rostro tiene que estar libre de maquillaje y se hará un pequeño masaje de manera circular, se dejará reposar por 10 minutos y después se retirará con agua fresca o tibia.
Si tu cutis es muy seca, mixta o grasa, es recomendable solamente aplicar la mascarilla de café una vez a la semana y usar una crema hidratante al final de la limpieza para el cuidado de la piel, pero como siempre, recomendamos hacer una pequeña prueba en el dorso de la mano o en una sección muy pequeña del rostro para ver cómo reacciona la piel.