Mantener limpios los productos que usamos para el cuidado de nuestra piel es indispensable para mantener una mejor salud, por lo que es importante cambiar las toallas de la casa.
Aunque podría parecer que son eternas, lo cierto que es que también tienen un tiempo de vida y, llegado el momento, lo más recomendable es usar unas nuevas, pues estas pueden acumular bacterias, microbios y demás organismos que podrían perjudicarnos.
¿Cuánto dura una toalla?
Las toallas para secar el cuerpo pueden servir entre 2 y 3 años, pues después de este tiempo comienzan a perder sus fibras, por tanto, el grosor se reduce a la par de su suavidad.
Mientras que las toallas para manos del baño podrían tener una duración más corta por la gran cantidad de humedad que pueden guardar.
¿Qué pasa si no se cambian las toallas?
El no cambiar con frecuencia las toallas puede lograr que se les haga un olor a humedad que, difícilmente, se quitará con jabón y agua, por lo que es importante deshacerte de ellas si lo presentan.
De acuerdo con un estudio de NSF International, las toallas para manos que ponemos en el baño podrían acumular organismos que nos dañan la salud, pues encontraron bacterias, moho y hasta E. Coli.
¿Cada cuánto se lavan las toallas?
Los expertos recomiendan no usar la misma toalla para manos por más de siete días seguidos; lo mejor es quitarla, lavarla y usar una nueva.
Por otra parte, si haces ejercicio, lo mejor es lavar tu toalla después de 3 o 4 días de usarla para secarte después del baño.
La recomendación para su lavado es no mezclarlas con otra ropa ni usar suavizantes, pues podría hacerles perder más rápido sus fibras y lo mejor es hacerlo con agua entre 40 y 60 grados. Al guardarlas, asegúrate de que estén bien secas.
Lavar las toallas de la casa regularmente les dará una mayor duración, pues evitará que se acumulen bacterias o moho que daña la salud.