A Netflix acaba de llegar una película bastante interesante sobre las consecuencias que hay en la vida adulta después de haber sufrido una infancia complicada. Su nombre es I, Tonya y está basada en una historia completamente real, así que en esta nota te vamos a platicar un poco sobre ella para que te animes a verla.
I, Tonya es una película estadounidense de 2017 dirigida por Craig Gillespie (a quien quizás recuerdes porque también dirigió la película de Cruella). Pertenece a los géneros de drama y biografía, y tiene una duración de dos horas. En el reparto encontramos a Margot Robbie en el papel principal y a Allison Janney y Sebastian Stan en los papeles secundarios.
Te podría interesar
Esta película está recomendada para aquellas personas a las que les hayan gustado otras películas biográficas que combinan drama con un poco de comedia, como El lobo de Wall Street, Foxcatcher, o incluso Vice y Hillbily, una elegía rural. Pero como también tiene muchísimo de patinaje artístico, está recomendada para las personas que les guste ese deporte o películas centradas en esa área, como La campeona de bronce, Patinando a la gloria y Sueños sobre hielo.
La verdadera historia detrás de la película, I, Tonya
Esta película cuenta la vida de Tonya Harding, una patinadora sobre hielo que vivió una vida llena de abusos y violencia por parte de su madre, y luego de su esposo, pero aún así perseveró hasta convertirse en Campeona de patinaje en Estados Unidos en 1991 y Subcampeona mundial en 1991 y luego de eso su desempeño comenzó a decaer hasta que en 1994 fue una de las protagonistas del ataque a Nancy Kerrigan, el cual se convirtió en todo un circo mediático.
En la película te muestran cómo Tonya comenzó a normalizar el abuso a una edad temprana debido a que su madre la maltrataba física y emocionalmente, así que cuando años después conoció a Jeff Gillooly, con quien se casó y que también le maltrataba, siguió casada con él.
Tras el ataque a Nancy Kerrigan, los medios intentaron culpar a Tonya Harding directamente e incluso la antagonizaron por la vida que llevaba. Y, si bien los responsables del ataque fueron Jeff Gillooly y Shawn Eckardt, Tonya se declaró culpable de obstrucción a la justicia, por lo que recibió tres años de libertad condicional, 500 horas de servicio comunitario y tuvo que pagar cien mil dólares de multa.
¿Qué pasó con la patinadora Tonya?
Por todo esto, Tonya Harding fue expulsada de por vida de la Asociación de patinaje de Estados Unidos y tuvo varios empleos, como pintora, soldadora y vendedora en una tienda departamental. Lo último que se supo de ella, laboralmente, es que trabaja como diseñadora y pintora en el estado de Washington.
En 2010 se casó con Joseph Prince y con él tuvo su único hijo, el cual se llama Gordon y nació en el 2011. Finalmente, en 2018 apareció en el popular programa de Ellen DeGeneres y ahí dijo que todavía patina sobre hielo y que lo practica unas cuantas veces a la semana.
Así que ya sabes, si quieres conocer más de la interesante y complicada vida de Tonya Harding, puedes ver la película I, Tonya en Netflix y seguramente no te vas a arrepentir. No olvides seguirnos en Facebook para más recomendaciones de películas y series en Netflix.