Una de las recomendaciones de los expertos en decoración es tener paredes blancas, esto ayuda a que la casa se vea más amplia y llena de luz, pero lo que nadie dice es lo complicado que es limpiar estos tonos, sin embargo, hay algunos trucos de limpieza que pueden hacer esta tarea mucho más sencilla.
Las paredes blancas en la casa son muy complicadas de mantener limpias, prácticamente todo las puede manchar, incluso el roce de los muebles o alguna salpicadura puede provocar que se vea sucia y descuidada por lo que es importante darles un mantenimiento continuo.
Sigue este sencillo truco de limpieza con el que podrás limpiar la pared blanca con delicadeza, así evitarás dañar la pintura y al mismo tiempo que eliminas por completo las manchas sin complicaciones.
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Trucos para limpiar la pared blanca sin quitar la pintura
- Vinagre blanco y bicarbonato sódico
Para utilizar este truco de limpieza tienes que considerar que debes usarlo solo en una pared blanca ya que si es de otros colores puedes llegar a deslavarlos. Prepara un limpiador casero con agua, jabón de trastes, vinagre blanco y bicarbonato de sodio.
Ahora comienza por eliminar cualquier resto o pegamento que pueda haber, luego toma una esponja suave y frota hasta limpiar las manchas, con un paño limpio seca y asegúrate de que la suciedad se haya ido por completo, si es necesario repite hasta que la pared blanca recupere su brillo original.
¿Qué se ocupa para blanquear una pared?
Una de las primeras opciones para recuperar el color de una pared blanca es el cloro, sin embargo, antes de aplicarlo tienes que probar en un rincón poco visible para asegurarte que no dañe la pintura. Los trucos de limpieza caseros con vinagre y bicarbonato son otra opción segura para limpiar.