Durante diciembre, los hogares mexicanos gastan un 27% más que en el resto del año y se estima que cada familia destina, en promedio, entre 2 mil y 5 mil pesos en la compra de ingredientes e insumos para la cena navideña, de acuerdo con un estudio realizado por Nielsen Consumer Facts.
Los banquetes, brindis y cenas rompen con la rutina y traen consigo normalmente un exceso de calorías que, en promedio, puede provocar un aumento de peso corporal de entre 3 y 5 kilos, en esta temporada. El sobrepeso y la obesidad pueden, en consecuencia, ocasionar altos niveles de glucosa, colesterol y triglicéridos y, en algunos casos, hipertensión.
Una encuesta realizada por la BBC News Mundo, consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), refiere que en México la tradición culinaria del mes de diciembre es comer los platillos típicos como: romeritos, pozole, pavo, pierna de cerdo, tamalitos, bacalao, ponche de frutas y ensalada de manzana.
Y respecto a los alimentos relacionados con la preparación de los platillos para las festividades a los que se les destina más dinero, la consultora especializada Kantar señala que son: cóctel de frutas en almíbar, que crece sus ventas en un 42%, el pimiento morrón 24% y las cremas lácteas 19%.
Asimismo, afirma que diciembre es el mes en el que más se consume cerveza, brandy, ron, tequila y destilados de agave, whisky, vodka y ginebra. Y destaca que del total del volumen de cerveza que se compra en el último mes del año, el 52% se compra entre los días 21 y 31.
Ante la epidemia de sobrepeso y obesidad y las enfermedades que conllevan, los expertos aconsejan, además de no consumir nada en exceso, elegir alimentos bajos en grasa, en la medida de lo posible; revisar las etiquetas de los alimentos para conocer el contenido de grasa y azúcar; medir las porciones en los platos; tener actividad física; incluir frutas y verduras en la dieta, así como limitar el consumo de alcohol y priorizar el agua natural.