Cuando llega el momento de cocinar pueden ser muchas las razones por las que no notas que es lo que estás llevando a la estufa y cuando se trata de carnes esto puede ser un gran riesgo, pero el pollo en mal estado envía ciertas pistas a las que tienes que prestar atención.
Ya sea por las prisas del trabajo o simplemente has tenido un mal día y te encuentras distraída al momento de cocinar, el pollo en mal estado puede pasar desapercibido si no se le pone la atención adecuada incluso llegar hasta nuestros platos.
El problema es que una vez cocinado algunas de las cosas que evidencian un pollo en mal estado se van con la cocción, pero eso no quiere decir que ya esté bien, ni mucho menos que sea seguro comerlo, pero si sospechas algo pon atención a estas señales.
¿Cómo saber si un pollo cocido está en mal estado?
Olor
Lo primero que deberías poder notar de un pollo cocido en mal estado es el desagradable olor que desprende durante el cocimiento, casi como huevos podridos, suele ser muy intenso y penetrante, pero si no estas seguro acércate bien y huele con detenimiento tanto la carne como el agua donde se haya cocinado.
Color
El color del pollo en mal estado es muy peculiar, ya que pierde su tono blanco característico de la carne y en su lugar aparecen manchas o definitivamente se vuelven completamente grises, toma un trozo y velo detenidamente.
Sabor
Si las señales anteriores no te convencen entonces llegó el momento de probarlo, debe ser un trozo muy pequeño, pero suficiente para que sientas el sabor, si es pollo en mal estado tendrá un gusto raro o incluso agrio y no debe de ser consumido.
¿Qué pasa si cocino pollo en mal estado?
Más allá de que un pollo en mal estado le dará un muy desagradable sabor a la comida, cocinar y comer este alimento puede resultar muy dañino para la salud ya que en él se desarrollan bacterias como la Salmonella o la Escherichia coli (E-Coli), causantes de fuertes infecciones gastrointestinales. Síguenos en Facebook para más contenido.