Ser mamá o papá es una etapa única en la vida y cuando se es primerizo puedes existir muchas dudas, desde cómo cargarlos, que alimentos puede consumir de acuerdo a la etapa donde se encuentre, cuál es la frecuencia con la que se debe bañar a un bebé, como cuidar su sueño, entre otras más.
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Para los padres y madres que son primerizos no olviden que este proceso debe ser acompañado de un especialista, el pediatra es la figura médica con el conocimiento exacto para guiar esta etapa nueva. Sin duda estar en contacto con él nos hará la vida más sencilla y con mayor certeza al momento de tomar decisiones.
Si una de las preguntas frecuentes es cada cuánto se debe bañar a tu bebé aquí te dejamos el dato, de acuerdo a algunos especialistas. Si bien podrías estar bañando a tu bebé a diario, los pediatras señalan que esto no es correcto ya que podría disminuir la producción de bacterias naturales lo cual provoca que el menor sea más susceptible a infecciones.
¿Cada cuándo debe bañar a mi bebé?
Un hecho es que bañar a los bebés diario representa más contradicciones que pros para su salud, ya que un bebé no se ensucia con la misma rapidez que un niño o adultos. Recordemos que la piel cuenta con sus propios mecanismos de limpieza y bañar con demasiada frecuencia a un bebé podría causar una dermis muy sensible y expuesta a infecciones.
Al nacer el bebé cuenta con una capa pacida construida por grasa, sudor y gérmenes útiles para su protección, por lo no se recomienda bañar al menor a diario, sin embargo, si existe una zona que debes cuidar y limpiar a diario, es la zona de los genitales. En cada cambio de pañal se debe tener una higiene exhaustiva.
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Si bien el baño con agua y jabón no es recomendable hacerse a diario, debemos cuidar algunas zonas de higiene recurrente, como son la zona del cuello y los pliegues de la piel como son axilas o ingles para retirar la suciedad excesiva, la cual puede ser retirada con una toallita húmeda.
Podríamos concluir que un equilibrio de baño es tres veces por semana, pero recuerda que el pediatra puede orientarte de mejor manera y la convivencia a diario con el bebé te ayudará a conocer las necesidades de él para poder brindarle los mejores cuidados.