La temporada de lluvia es lo mejor para el planeta, las plantas crecen, deja de hacer calor y el cielo se limpia un poco, pero para tus zapatos, toda esa agua, charcos y humedad no es exactamente buena.
Primero debes de saber que no todos los zapatos son iguales, el cuidado que debes tener con ellos depende principalmente del material con el que estén hechos. Hay materiales mucho más delicados que otros, pero puedes comenzar comprando con un spray especial para cuidarlos del agua. Estos los puedes conseguir en las tiendas donde los adquiriste o en las zapaterías.
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Los zapatos tienen la particularidad de ir siempre tocando el suelo. Esto le hace especialmente vulnerable en días de lluvia. Además, el calzado en general, y los zapatos en particular, suelen estar hechos de materiales que sufren con el agua, como son ante o cuero. Y también debes prestarles especial atención por la sencilla razón de que un traje no luce igual con un zapato sucio y descuidado. Si quieres cuidar tus zapatos a pesar de la lluvia, claro que se puede y por eso te traemos 5 tips para protegerlos de la lluvia
Tips para cuidar tus zapatos en temporadas de lluvias
1. Secalos
Si tus zapatos de piel, costosos y de calidad, se mojan lo primero que debes hacer es secarlos al aire libre o con un ventilador, deja que se sequen naturalmente. No le apliques calor con un secador o los pongas cerca de la calefacción. Tampoco dejes los zapatos mojados cerca del aire acondicionado, porque permanecerán húmedos.
Asegúrate que se sequen bien por dentro, porque de otra forma podrías tener hongos o una infección en los pies al usar zapatos húmedos. Para esto puedes colocar papel periódico o de cocina dentro del zapato.
2. Invierte en los “gadgets” correctos
Ya existen sprays que ayudan a proteger tus tenis y zapatos del agua (algo así como un impermeabilizante para zapatos), estos repelentes funcionan como una barrera protectora y ayudan a proteger el material de tus zapatos de la lluvia. Una cera también puede ayudarte y un cepillo suave y pequeño puede ser tu salvación para quitar manchas.
3. No los guardes si están húmedos
Es uno de los descuidos más agresivos que le puedes hacer a tus zapatos, porque al hacerlo estarás provocando que tus calzados tengan mal olor, se malgasten, incluso romperse.
Si fuiste completamente descuidado y los guardaste mojados, también hay soluciones, como utilizar una bolsita de bicarbonato de sodio en el fondo del zapato, dejarlo por una noche y el problema estará resuelto.
4. Cepilla el calzado habitualmente
Especialmente si es de ante. Hazlo siempre en la misma dirección y con un cepillo especializado de cerdas metálicas, evitarás que se acumule polvo extraño en la superficie si se moja con la lluvia.
5. Límpialos
Para limpiar tus zapatos llenos de lodo o fango puedes usar un cepillo de dientes o un paño seco. No frotes demasiado duro, porque se marcará la piel. Para terminar de secarlos echa un poco de polvo especial para zapatos dentro, así se eliminará cualquier resto de humedad que quede dentro. Después puedes darles el mantenimiento normal a tus zapatos. Invierte en un buen betún para limpiarlos, esto no solo ayudará a que queden brillantes, sino que los protegerá de la humedad.
Para conservar el calzado y alargar su vida en buenas condiciones, conviene no usarlo en días consecutivos. Hay que dejarlos descansar, ventilar y recuperarse.
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