Uno de los problemas más comunes que podemos encontrarnos en una cocina de acero inoxidable es sin lugar a dudas la aparición de las molestas manchas de sarro, las cuales si no atacamos de inmediato con un efectivo truco de limpieza se vuelven cada día más grandes y evidentes.
A pesar de que el acero inoxidable es uno de los materiales más resistentes y limpios que podemos utilizar en la cocina, ni siquiera él se salva del terrible sarro, y esque este no es un tipo de suciedad de la que nos podamos deshacer con solo un poco de agua y jabón.
El sarro está formado por partículas de minerales como el calcio y el magnesio las cuales son arrastradas por el agua de las tuberías hasta llevar a la cocina de acero inoxidable, por lo que siempre debemos tener algunos trucos de limpieza preparados para eliminarlos por completo.
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¿Cómo quitar el sarro de la cocina de acero inoxidable?
Materiales:
- Limón
- Sal
- Franela limpia
- Agua
Preparación:
- Corta un par de limones por la mitad
- Agrega una capa de sal sobre el limón
Uso:
- Limpia el exceso de suciedad de la cocina de acero inoxidable con agua y jabón.
- Ahora frota las manchas de sarro con las mitades de limón cubiertas con sal, cuida hacerlo en el mismo sentido del diseño del acero inoxidable.
- Deja con el jugo de limón con sal por 20 minutos para que haga un mejor efecto.
- Limpia con una franela limpia y húmeda para quitar los restos de sarro y finalmente seca
¿Cómo dar brillo a una cocina de acero inoxidable?
Materiales:
- Aceite de oliva
- Un par de franelas limpias
Uso:
- Da una limpieza profunda a la cocina de acero inoxidable para eliminar el sarro y suciedad que pudiera tener impregnada.
- Coloca apenas un par de gotas de aceite en un trapo limpio y frota sobre toda la superficie de acero inoxidable. Añade poco a poco más aceite para cubrir cada rincón.
- Con otra franela limpia haz una última limpieza para eliminar el exceso de aceite que pudiera haber quedado en la superficie.
¿Cómo evitar el sarro en mi cocina de acero inoxidable?
El sarro es casi imposible de evitar en superficies que están en constante contacto con el agua como las cocinas de acero inoxidable, pero para retrasar su aparición lo más posible los expertos recomiendan aplicar un poco de vinagre blanco por lo menos una vez a la semana durante su lavado, este truco de limpieza desintegra las partículas que crean esas molestas manchas.
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