Los medicamentos siempre deben tomarse antes de la fecha de caducidad que figura en el envase para evitar tener algunas consecuencias en la salud.
Consecuencias de tomar un medicamento caducado
Si accidentalmente tomaste un medicamento caducado por un trastorno leve como un resfriado o un dolor de cabeza, no te preocupes, porque en el peor de los casos no le hará efecto. En cambio, si se trata de un medicamento esencial para el tratamiento de una enfermedad grave o crónica, consulte con su profesional sanitario de referencia, ya que la potencial falta de eficacia podría perjudicar su salud.
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En 1982 la Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció que las fechas de expiración de un medicamento debería ser de dos a cinco años, actualmente, la mayoría tiene un período de dos a tres años.
Pasado este tiempo, el medicamento no garantiza que su estabilidad sea óptima, es decir, no se puede garantizar la seguridad, la calidad y eficacia de estos. El principal problema de tomar un medicamento caducado es que ya no tendrá efecto en el organismo y, dependiendo de las afecciones de la persona, puede ser altamente perjudicial para su tratamiento.
El consumir un medicamento caducado, no supondrá muchos riesgos si se trata de un trastorno leve, como un resfriado o un dolor de cabeza, ya que solo seguirán los síntomas que se querían disminuir. Sin embargo, cuando se trata de un medicamento esencial para enfermedades graves, hará que el tratamiento corra peligro, por lo que es necesario consultar con el médico de cabecera, para sustituirlos cuanto antes.
La fecha de caducidad del fabricante se basa en la estabilidad del fármaco en el envase original cerrado. La fecha no indica necesariamente que el fármaco sea inestable tras un periodo más prolongado; solo significa que los datos en tiempo real o las extrapolaciones a partir de los estudios de degradación acelerada indican que el fármaco en el envase cerrado aún será estable en esa fecha.
La mayoría de los medicamentos traen indicado un periodo de validez de entre 1 y 5 años, pero, una vez se abre el envase original, la fecha de caducidad que figura en el mismo deja de ser válida.
¿Qué le pasará a mi cuerpo si tomé un medicamento caducado?
Un medicamento contiene un ingrediente activo, por ejemplo, paracetamol o ibuprofeno, que se añade a una forma farmacéutica concreta (pastilla, tableta, cápsula, etc.), todo en un envase que puede ser una botella, una ampolla o una caja. Con el tiempo, el ingrediente activo se degrada gradualmente, a menudo bajo la influencia de factores externos. Este proceso es, en la mayoría de los casos, lento.
En el momento de la fabricación, el contenido del ingrediente activo será del 100%; con el tiempo, se irá degradando de forma gradual. Esto es lo que se denomina la estabilidad de un medicamento.
Si te tomaste una medicina caduca pero su vencimiento tiene poco tiempo, la posibilidad de que sus componentes sean tóxicos es baja. Pero tomar un medicamento caducado puede traer condiciones más graves.
Un especialista comenta que, mientras más pasa el tiempo, las medicinas pueden estar contaminadas por bacterias u hongos por haberlos guardado en malas condiciones; o que sus componentes químicos se desestabilicen y se hagan tóxicos. Esto puede provocar una anafilaxia, que es una reacción alérgica grave en todo el cuerpo a un químico que se ha convertido en alérgeno.
Nunca hay que tomar un medicamento caducado, pero, como comentábamos antes, hay algunos más estables que otros y depende de para qué nos lo tomemos. Y es que, si un medicamento para el dolor agudo o el catarro no nos hace efecto, no pasa nada, pero en el caso de medicamentos para una dolencia crónica (como diabetes, asma, etc.) si perdemos eficacia, estaremos comprometiendo nuestra salud.