Este mundo es para los fuertes, y no hay mejor fortaleza que aquella que se consigue a través de la paciencia. La sociedad sigue cambiando, y no se detiene; hoy en día todo parece ir de prisa, no hay tregua para los más calmados. Por esta razón es tan común ver a gente explotar ante la mínima provocación. No queremos que eso te pase a ti, por eso te daremos las claves para ser una persona paciente y tolerancia.
La verdad es que convertirse en una persona paciente no es fácil; vivimos en la era de la inmediatez, en los que los tiempos de espera son diminutos. Pero lo puedes lograr, no es imposible. Además, puedes encontrar beneficios significativos en la tolerancia. Sara Navarrete, directora del Centro de Psicología Clínica y de Salud de Valencia, mencionó que las personas con mayor tolerancia presentan menos conflictos en su día a día.
Si quieres dejar de explotar por todo, evitar la irritación cuando no recibes lo que quieres, además de esperar y tolerar la incertidumbre con la mejor manera posible, quédate. A continuación te diremos las claves para ser una persona paciente y tolerante.
Te podría interesar
¿Cómo aprender a tener paciencia y tolerancia?
No exagerar
La principal clave para no explotar ante la mínima provocación tiene que ver con evitar las exageraciones. No tienes porque hacer una tormenta en un vaso de agua. ¿Realmente es de vida o muerte que la fila del súper vaya más lenta de lo normal? Es cierto que hay actividades, y las prisas nos consumen, pero la molestia e irritabilidad no va a mejorar nada.
Darle importancia real y objetiva a las cosas
Si quieres ser más paciente y tolerante debes tomar en cuenta el valor real de las cosas. Tenemos la tendencia de darle mucho poder a cosas insignificantes, es por eso que explotamos con mayor facilidad, porque cualquier estímulo logra tener influencia en nosotros.
Antes de que te entre la furia, sería pertinente que te cuestionaras por qué cosas tan simples te llevan al límite. ¿Es crucial que el video que vas a ver a la hora de la comida cargue en 0.5 segundos?, o ¿puedes darle el tiempo a que la conexión de Internet vaya mejor?
Aceptar que hay cosas que no dependen de nosotros
Otra clave que los especialistas consideran importantes es la aceptación de nuestro poder de acción. Generalmente las personas que más control quieren tener, son las que más rápido explotan. Deja que las cosas, en las cuales no tienes influencia, lleguen como la vida quiere; y esfuérzate en aquello en lo que sí tienes poder de injerencia. La vida te hará esperar sí o sí, tú decides con qué actitud tomas ese tiempo de espera. Cuando hagas las paces con ello, verás que te conviertes en un ser más tolerante.
Pensar antes de reaccionar
Si quieres ser una persona más paciente y tolerante debes entrenar tus reacciones. Deja de actuar bajo el primer impulso que llegue a ti, toma el tiempo para procesar la situación desde la razón y respira. No hables o escribas cuando sientas que tus emociones están hablando, dale espacio al cerebro.
Aprende a vivir en el presente
Por último, pero no menos importante, vive el presente. Las personas que son pacientes y tolerantes ya no se mortifican por lo que pasó, soltaron y evitaron que un mal recuerdo los saque del centro: no pueden hacer nada para cambiar lo que ya ocurrió. Tampoco se angustian por el futuro, aceptan la incertidumbre como lo que es, no dejan que las expectativas los consuman.
Saber afrontar la incertidumbre es la mejor manera para evitar conflictos innecesarios en la cotidianidad. Sabemos que hay mil razones para explotar, y también estar molestos con el mundo, pero hay cosas que se salen de nuestras manos, enfócate en ti. Si aprendes a ser una persona paciente y tolerante verás que la vida se siente mucho más ligera. Esperamos que estas claves te hayan servido, si quieres más información para el bienestar emocional síguenos en Instagram.