Tener plantas, ya sea en macetas en el jardín requiere de ciertos cuidados para mantenerlas bonitas y en crecimiento, además existen diferentes tipos de plantas con requerimientos muy diferentes entre cada una de ellas, pero en el caso específico de las suculentas, el abono casero es una excelente alternativa ecológica y de bajo costo.
Muchas veces nos dejamos llevar por la idea de que las suculentas, al ser una planta que no requiere muchos cuidados, con regarla de vez en cuando es más que suficiente para mantener sus hojas brillantes y verdes, pero esto no es del todo cierto, pues al igual que todas necesita los minerales de la tierra para alimentarse.
Con el paso de los años las suculentas acaban con estas propiedades de la tierra y si no las reponemos pueden llegar a morir. Es entonces cuando el abono casero surge cómo un alternativa económica y eficaz para darle los cuidados que necesita y que pueda seguir creciendo y lucir sus hermosas hojas verdes.
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El abono casero para las suculentas
Ingredientes:
- 2 cucharadas de cáscaras de huevo.
- 4 litros de agua.
Preparación:
- Comienza por enjuagar muy bien la cáscara de huevo para eliminar los restos de clara y yema.
- Luego tritura muy bien toda la cáscara con ayuda de un mortero o pasándolas por la licuadora o procesador de alimentos.
- En una olla pon a hervir los 4 litros de agua junto con las cucharadas grandes de cáscaras de huevo.
- Deja hervir por 10 minutos y deja reposar por 24 horas antes de colar con ayuda de un paño limpio para retirar los restos de cáscara del abono casero.
¿Cómo poner abono casero en las suculentas?
Colocar abono casero en nuestras suculentas es muy importante para mantener la tierra nutrida y por lo tanto las plantas sanas. Para usar el de cáscaras de huevo solo tienes que tener la infusión preparada y regar abundantemente tus macetas. Recuerda que estas especies no requieren mucho abono, así que solo aplícalo una vez al año.
¿Cómo cuidar las suculentas?
- Luz: Las suculentas necesitan mucha luz para prosperar. Lo ideal es colocarlas en un lugar donde reciban al menos 6 horas de luz solar al día.
- Regar en profundidad: Cuando riegues tus suculentas, asegúrate de hacerlo en profundidad hasta que el agua salga por los agujeros de drenaje de la maceta. Espera que la tierra esté seca entre riego y riego.
- Drenaje: Las suculentas necesitan un suelo con buen drenaje para evitar que se pudran las raíces.
- Fertilizar: Las suculentas no necesitan abono con mucha frecuencia. Basta con fertilizarlas una vez al mes durante la primavera.
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