Nuestro cabello es parte fundamental de nuestra imagen, por lo que tienen un protagonismo peculiar, por ello su caída o alopecia es algo que preocupa e interesa a mujeres y hombres. Es muy importante que si detectas una perdida anormal, lo consultes con tu dermatólogo para un diagnóstico médico.
Te podría interesar
No obstante, tradicionalmente para la prevención y fortalecimiento del cabello, los aceites esenciales se han popularizado debido a la cantidad de nutrientes que pueden aportar a los folículos pilosos. Algunos pueden ayudarnos, para fortalecer e incentivar el crecimiento con mayor rapidez. Por ello te enumeramos cuatro aceites naturales para evitar la caída del cabello:
1- Aceite de bergamota
Este es un aceite muy bueno para los cabellos grasos, ya que ayuda a mejorar su aspecto y a regular el sebo en el cuero cabelludo, además es eficaz para fortalecer la fibras capilares, lo que ayudará a prevenir la caída del cabello, esto gracias a que contiene nutrientes como acetato de linalyl, limoneno, vitaminas C, A y B, minerales como el fósforo, calcio, hierro, potasio y sodio.
2- Aceite de ricino
Ayuda a que el cabello sea resistente y brillante ya que sus nutrientes aportan ácidos grasos necesarios, estos son eficaces para prevenir la caída del cabello y retrasa también la aparición de canas, ayuda a reducir la caspa y la recequedad en el cuero cabelludo.
3- Aceite de romero
Es reconocido por ayudar a la circulación lo que ayuda al crecimiento y fortalecimiento de los folículos pilosos, por lo que se recomienda para cabello fino y quebradizo.
4- Aceite de aguacate
Ayuda a estimular el crecimiento y proporciona fuerza, vitalidad y brillo. Al aplicarlo diario podrás ver aumento de volumen. Sus nutrientes son eficaces tanto en el campo nutricional como en el cosmético, donde abundan los tocoferoles (vitamina E), los carotenoides (precursores de la vitamina A) y los fitoesteroles (beta-sitosterol, campesterol, citrostadienol, etc.), alcoholes terpénicos, avocatina y ácidos volátiles.
Recuerda que el cabello es un fibra compuesta principalmente por proteínas que se forma en el folículo piloso. En la piel cabelluda tenemos entre 100 y 120 mil folículos y cada uno de ellos puede dar origen a uno, dos o tres pelos. El 90% de los pelos crece mientras el 10% está en una fase de reposo. Cuando estos pelos que descansaban finalizan el reposo después de 2 o 3 meses, se caen y son reemplazados por pelos activos que crecen continuamente.