Convivir con un núcleo social como es la familia, los compañeros de trabajo, la escuela, alguna actividad recreativa o los amigos resulta estimulante para muchas personas. Sobre todo, aquellas que se consideran sociales o extrovertidos, sin embargo, también existen casos de personas introvertidas que relacionarse con otras personas no les resulta fácil.
Te podría interesar
Al presentar dificultades para relacionarse con otras personas puede causar ciertas dudas en nuestra mente, como es si algo no está bien con nosotros o si existe algún problema. Para empezar, debemos saber que es un problema común, son más las personas que en ocasiones se enfrentan a dificultades para socializar.
Por otros lado debes saber que este problema de relacionarse con las personas tiene solución y puedes trabajarlo, ya que como seres humanos en nuestra naturaleza está ser seres sociales que viven y se desarrollan en comunidad. Esto quiere decir que si identificamos las causas de porque nos cuesta trabajo, podremos comenzar a solucionarlo.
Causas de por qué te cuesta relacionarte con otras personas
Si bien mencionamos que ser sociable es una habilidad humana, debes quitar de la mente que ser extrovertido es un súper poder del que solo algunos cuentan. Ya que independientemente de ser introvertido o extrovertido se puede tener una vida social éxitos.
Para poder trabajar en una mejor forma de relacionarnos con otras personas debemos identificar algunas vivencias que se tuvieron durante la infancia, ya que es en esta etapa donde las habilidades de desarrollarnos con otros se estimulan o se aminora.
Reflexiona sobre el trato de tus padres o cuidadores con su entorno y contigo, te permitían decir lo que sentías, ellos expresaban sus pensamientos, sus habilidades de comunicación con otros eran de manera fluida o también se limitaban.
Te podría interesar
Los padres y el entorno familiar son los primeros referentes de actitudes, por ello si fueron poco afectivos esto impacta directamente en las competencias verbales, emocionales o conductuales.
Otras causas sobre porque nos cuesta relacionarnos con las personas tiene origen en dimensiones psicológicas o neurológicas que se reflejan en algunos trastornos que no han sido detectados a tiempo. Un caso es el espectro de autistas donde existe el síndrome de Asperger que puede pasar desapercibido.
La ansiedad y el estrés también son causas de que nos cueste trabajo relacionarnos con las demás personas.
Finalmente existe condiciones psicológicas como el trastorno antisocial de la personalidad donde existe una focia social o la agorafobia que es temer a estar en confrontamiento dificultades.
Ahora que ya conoces algunas de las causas que podrían originar la dificultad de relacionarte con otras personas, puede comenzar a trabajar en mejorar o estimular esta habilidad. La mejor manera es hacerlo en compañía de un especialista como lo es un psicólogo, ya podrá orientarte en todo momento.